Descubrimiento de los elementos químicos. Parte 2

Un vistazo a como se descubrió el manganeso, molibdeno, níquel, platino, cromo y berilio

7/2/20251 min read

🟢 Níquel

Fue descubierto por Axel Fredrik Cronstedt, un discípulo de Brandt. Examinando un mineral verdoso al que los mineros alemanes llamaban kupfernickel (“el diablo del cobre”), porque se parecía al cobre pero no lo era, logró aislar un nuevo metal calentando el mineral con carbón vegetal. El resultado fue un metal magnético y de compuestos verdes, lo que le confirmó que estaba ante un elemento nuevo. Lo llamó níquel, acortando el apodo minero original.

🟣 Manganeso

Johan Gottlieb Gahn, químico y antiguo minero, trabajaba con un mineral que, al calentar, teñía el cristal de violeta. Durante años se pensó que contenía un nuevo metal, pero nadie lograba aislarlo. Gahn lo consiguió finalmente al mezclar el mineral con carbón de leña y aceite, y obtuvo un nuevo elemento metálico que bautizaron como manganeso, una deformación del nombre original del mineral: “magnesio” (con el que también se lo confundía).

Molibdeno

Pedro Jacobo Hjelm, químico sueco, logró aislar un nuevo metal a partir de una mena llamada molibdena, confundida durante mucho tiempo con una mena de plomo. El nombre molibdeno proviene del griego molybdos (plomo), aunque el metal extraído resultó ser plateado, brillante y claramente diferente

Para su descibrimiento Jacobo partió de una mezcla de molibenita (MoS2) y ácido nítrico obtenido cuatro años antes por W. Scheele. Fue capaz de reducirlo con carbono

Platino

Uno de los primeros metales descubiertos fuera de Europa. En 1748, el marino español Antonio de Ulloa, en una expedición científica por Colombia y Perú, encontró pepitas de un metal blanco parecido a la plata, pero mucho más pesado y difícil de fundir. Por ese parecido se le llamó platino, diminutivo de “plata”.

🟢 Cromo y Berilio

En 1798, un químico francés, Louis Nicolas Vauquelin, analizaba un mineral descubierto en Siberia. Consiguió del mismo unos hermosos compuestos rojos y amarillos, que se volvían de un brillante color verde cuando se añadían determinados productos químicos. De estos compuestos extrajo el óxido de un nuevo metal y, calentando el óxido con carbón vegetal, aisló trozos del metal en sí. Lo llamó cromo, de la palabra griega chroma, que significa «color». Al año siguiente, Vauquelin descubrió un óxido de otro nuevo metal en una gema semipreciosa llamada berilo. Este metal sería denominado berilio